Briquet Grifon Vendeano

Historia de la Raza:
El Briquet Grifon Vendeano (conocido también como Grifon Vendeano Medio) pertenece a la familia de los Grifon Vendeanos. A esa familia se juntan el Gran Basset y el Pequeño Basset Grifon Vendeano. Se cree que haya surgido cerca del siglo XVI, cuando la caza era un deporte generalmente elitista, reservado a la realeza y clases aristocráticas.
Se sabe que en eses tiempos habían “razas reales” (como el Fauve de Bretagne, Perro de San Humberto, Perro Blanco del Rey, entre otras) que se han cruzado sucesivamente con galgos y sabuesos de la aristocracia, obteniéndose perros de caza más aptos a determinados fines. El Gran Grifon debe de descender precisamente del cruce entre un Perro de San Humberto y una perra italiana blanca, llamándose las crías “Perros Blancos del Rey”, a lo mejor por haber sido ofrecidas al rey Luis XII. El Briquet Grifon, por su parte, desciende de este su pariente y del Griz de St. Louis.
El Briquet Grifon Vendeano ha sido desde siempre utilizado para cazar conejos y raposas, sea en pequeñas jaurías o solo. Se cree que la raza moderna se estableció en 1910. Así como su ascendiente (el Gran Grifon), esta raza tampoco ha disfrutado de la popularidad internacional que tenían las variantes Basset, siendo un participante poco asiduo en exposiciones caninas.
El primero clube de la raza de Vendeanos se creó en 1907 – Club du Basset Griffon Vendéen – pero sólo en 1924 el presidente de este clube, Paul Dèzamy, ha decidido cambiarle el nombre para Club du Griffon Vendéen, incluindo el Braquet y el Gran Grifon Vendeano.
Con la II Guerra Mundial, esta variante ha pasado por un periodo particularmente difícil debido al ablandamiento significativo de su criamiento. Hasta 1985 la familia Dèzamy ha estado siempre empeñada en la protección y criamiento de esta estirpe, que logró el reconocimiento de la Fédération Cynologique Internationale.
Actualmente, los Briquet son poco conocidos internacionalmente pero son populares en su tierra natal, adonde siguen siendo utilizados como perros de caza.

Temperamento:
El Briquet es un perro muy activo y determinado que puede ser un bueno perro de guarda, ya que está siempre alerta. Necesita de estar ocupado, sea cazando o desarrollando alguna actividad interesante, no siendo el papel de perro de compañía su principal vocación.
Es, sobretodo, un perro afable, fiel a su dueño y simpático hacia los niños. Le encanta ser el centro de las atenciones y de hecho requiere alguna atención. Tiene bastante iniciativa y es independiente, recomendándose alguna experiencia previa con este tipo de temperamentos.

Descripción:
El pelaje del Briquet es considerablemente largo y el subpelo es denso. Se permiten los colores gamo o liebre uniforme o el blanco con marcas rojas, gamo, grises o negras.
Su cráneo es un poco ancho y el chaflán bien definido. Tiene ojos grandes, ovales y oscuros, con cejas salientes. Las orejas son achatadas y pendientes.
Su estructura es sólida y bien constituida. El cuello es largo y el pecho es profundo pero no muy ancho. Las costillas con un poco curvadas y el lomo y dorso son robustos y firmes. Los miembros se constituyen de fuertes huesos, largos y musculosos muslos y pies cubiertos de pelo. Suele traer la cola, de inserción elevada, como un sable, estrechándose progresivamente hasta la punta.

Observaciones:
Esta raza de perros no suele presentar tendencia para las enfermedades más delicadas. Se debe cepillarle su pelo semanalmente, verificando al mismo tiempo el interior de las orejas para prevenir infecciones. Son perros muy activos que necesitan de practicar ejercicio a diario. Se adaptan mejor a la vida rural que al escenario urbano, pero pueden ser acostumbrados desde jóvenes a vivir en la ciudad caso practiquen alguna actividad diaria.